Happy New Year to everyone! This greeting might seem a little odd at first, but it is actually very appropriate as we begin a new liturgical year. The Solemnity of Christ the King ended the liturgical year and today, December 2nd, marks the beginning of Advent and the new year.
The season of Advent includes the first four Sundays of the new year. The candles of our Advent Wreath mark the passing of each of these weeks. During Advent, the Church uses the color purple to call our attention to pen- ance and preparation for the coming of Jesus Christ.
The traditional ways in which we spiritually prepare ourselves include taking advantage of the Sacrament of Reconciliation. If you haven’t gone to confession in a while, I would encourage you to do so. We also prepare ourselves through regular reception of Holy Communion and increasing our efforts at personal prayer.
One final way we can prepare ourselves for the arrival of Jesus at Christmas is making sure we are reconciled with one another. The Lord invites us to forgive those who have offended us and, if we have hurt another, to reach out to ask for forgiveness for ourselves. This reconciliation manifests the love, mercy and justice we find in our new-born king and Messiah. Happy Advent!
Sincerely,
Rev. Miguel González
En Español:
H ¡Feliz Año Nuevo a todos! Este saludo puede parecer un poco extraño al principio, pero en realidad es muy apropiado al comenzar un nuevo año litúrgico. Con La solemnidad de Cristo Rey terminó el ano liturgico y hoy, 2 de diciembre, marca el comienzo del Adviento y el año nuevo.
La temporada de Adviento incluye los primeros cuatro domingos del nuevo año. Las velas de nuestra Corona de Adviento marcan el paso de cada una de estas semanas. Durante el Adviento, la Iglesia usa el color morado para llamar nuestra atencion a la penitencia y la preparación para la venida de Jesucristo.
Las formas tradicionales en que nos preparamos espiritualmente incluyen aprovechar el Sacramento de la Reconciliación. Si ya tienes tiempo sin confesarte, te invito a que lo hagas. También nos preparamos a traves de la recepcion regular de la Sagrada Comunión y aumentando nuestros esfuerzos en la oración personal.
Una última forma en que podemos prepararnos para la llegada de Jesus en la Navidad es asegurándonos de que nos reconciliamos unos con otros. El Señor nos invita a perdonar a quienes nos han ofendido y, si hemos lastimado a otro, a pedir perdón. Esta reconciliación manifiesta el amor, la misericordia y la justicia que encontramos en nuestro rey reciën nacido y el Mesías. Feliz adviento!
Sinceramente,
Rev. Miguel González